Sismos del Volcán Cay se relacionarían con la falla Liquiñe-Ofqui

Jefe de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica del organismo entrega luces respecto a los fenómenos sísmicos en Aysén.

El enjambre sísmico de temblores de baja magnitud en los alrededores del volcán Cay, en la provincia de Aysén, estaría relacionado con la falla Liquiñe-Ofqui, una falla de 1.200 kilómetros en la cordillera de Los Andes y que nace en el norte de la REgión de Los Ríos hasta el itsmo de Ofqui en la Región de Aysén.

Álvaro Amigo, jefe de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica de Sernageomin, conversó con Diario Regional Aysén y expresó que dicha falla, que fue inferida por primera vez en 1900 por el geólogo y explorador Hans Steffens, quien la calificó como “surco tectónico”.

Amigo expresó que el enjambre sísmico básicamente refleja una serie de actividad que no está asociado a un evento grande, vale decir un terremoto.

“Es un conjunto de sismos de más o menos la misma magnitud y por lo tanto lo que puede causar eso es un reacomodo de la estructuras geológicas que se encuentran en los alrededores del volcán Cay que pueden estar acomodándose ante la presión o llegada de material en profundidad bajo el volcán o el movimiento de la falla Liquiñe- Ofqui que también se encuentra en los alrededores”, expresó.

El geólogo de Sernageomin indicó que son variadas las interpretaciones de lo que podría ser el origen de este fenómeno y una de las características del enjambre es que no presenta actividad de fluidos, solamente ruptura de material y, por lo tanto, es considerado un enjambre de sismos volcano tectónicos.

"Eso quiere decir que sólo hay ruptura de material al interior del volcán y no movimientos de gases o magma eventualmente", especificó Álvaro Amigo.

El volcán

Respecto a las caracteríaticas del volcán Cay, Amigo reconoció que para los geólogos es “relativamente desconocido” porque son pocas las caracterizaciones que se han hecho de él.

El volcán Cay está ubicado cerca del volcán Macá y es más bajo que éste y es parte de toda una zona volcánica que se encuentra entre el fiordo de Aysén y el fiordo de Puyuhuapi.

“Los dos volcanes (el Cay y Macá) están cubiertos de nieve y con casquetes importantes de hielo y se ha documentado erupciones en tiempos geológicos, o sea en los últimos miles de años, pero no hay actividad en los últimos siglos”, aseguró.

Álvaro Amigo dijo que en el hipotético caso de una erupción el verdadero peligro es el deshielo de los casquetes que producirían aluviones volcánicos hacia los ríos del sector norte donde no hay mucha población y añadió que la gran molestia sería la ceniza que se expandiría al sector oeste y eso dependiendo de los vientos. 

La falla

Sobre la relación del enjambre sísmico con otro fenómeno vulcanológico o tectónico, Álvaro Amigo expresó que esa, sin duda sería la falla Liquiñe-Ofqui.

“Hay una estructura muy importante en la zona que es la falla Liquiñe-Ofqui que es la responsable del enjambre sísmico de Aysén y del terremoto del fiordo en el año 2007 y el tsunami asociado posteriormente”, indicó. 

“Es una falla activa que en la zona tiene un desplazamiento cerca de los volcanes Macá y Cay y por lo tanto podría ser una falla de una rama que se está moviendo y acomodándose este enjambre. Creemos que tiene relación con terremotos de la zona de interfase de las placas y se relaciona más a una tectónica local”, concluyó el experto de Sernageomin.

Cerca de la falla se ubican diversos volcanes activos tales como el Llaima, Villarrica, Mocho-Choshuenco, Corcovado, Macá, Puyehue, Yates y Hudson. La actividad sismológica resurgió en 2007 cuando en la falla se produjo el epicentro del terremoto de Aysén de 2007 y en mayo de 2008 hizo erupción el volcán Chaitén, luego de diez mil años de inactividad aproximadamente.